El Asedio al Santuario de la Virgen de la Cabeza.
El asedio al Santuario de la Virgen de la Cabeza constituye un episodio más de la guerra civil española que por la trascendencia que tuvo en su día debe ser considerado en capítulo aparte y, por tanto, ser objeto de un profundo y detallado estudio, que hoy ochenta y cinco años después sorprende que aún queden algunos hechos y fotografías de este episodio totalmente inéditos, pues dormían en diferentes archivos históricos a la espera de su publicación.
El presente libro está basado en un profundo e intenso trabajo de investigación, para lo cual he debido de rescatar del pasado un gran número de datos de diferentes archivos históricos, fuentes orales y de haber consultado numerosos libros sobre esta temática. De la presente publicación destaco, especialmente, el tratamiento objetivo e imparcial que se realiza de estos hechos históricos, ya que en todo momento he intentado compilar tanto los partes del Capitán Cortés y de Queipo de Llano como la singular narración de los hechos que realiza el teniente coronel Cordón, jefe del ejército republicano que acabó con este singular asedio.
Así, puede decirse, que la táctica llevada a cabo por el ejército republicano fue, en un primer momento, de dejar que aquellos caigan por sí solos. Al principio existieron unos días tranquilos, relativamente al menos, pero con el paso de los meses las fuerzas sitiadoras acabaron viendo que ni el tiempo, ni el aislamiento, ni siquiera la presunción de que no iban a ser socorridos era capaz de doblegar el ánimo de estos asediados, que a pesar de las muchas penurias que pasaron, caracterizadas por la falta de una alimentación adecuada al tener que alimentarse en varias ocasiones de madroños, hierbas y diversos arbustos. Entonces los republicanos, ante la relevancia que estaban adquiriendo los hechos y el tiempo transcurrido -nueve meses de continuos bombardeos- acudieron a los medios de destrucción, que utilizaron de menos a más, hasta llegar prácticamente a convertir en ruinas el Santuario de Santa María de la Cabeza de Andújar.
De la táctica de los cercados, poco debo añadir. Siguen la vieja línea hispana de morir antes de ceder y su gesta recordará otras antiguas y aún antiquísimas, que parecían sepultadas en el olvido. En definitiva, a través de este libro todos podrán llegar a conocer perfectamente a quienes participaron en este singular asedio, a la figura del Capitán Cortés, que a pesar del largo tiempo transcurrido desde entonces muchas ciudades de España aún conservan en su callejero un recuerdo a este capitán de la guardia civil, natural de Valdepeñas de Jaén, que dejó su vida luchando por una causa, que para él era legítima, justa y ennoblecedora.
Lo mismo puedo decir del capitán Carlos de Haya, adiestrado piloto que fue el auténtico salvador de los refugiados al suministrarles continuamente víveres y armamento. También dedico un capítulo aparte a las memorias del teniente coronel Cordón, cuyo disciplinado ejército, gracias a una hábil maniobra de aproximación y cerco continuo consiguió al final doblegar la posición y que ondeara la bandera blanca en el Santuario.
Nº de páginas: 136
Editorial: Edición propia
Encuadernación: Taba blanda
ISBN: 84-609-1981-1
Año de edición: 2004